miércoles, 23 de abril de 2008

Un poco de cinta adhesiva contra el polvo lunar

El episodio 5 de las Crónicas del Apolo cuenta una curiosa historia del Apolo 17, en la que los astronautas Harrison Schmitt y Eugene Cernan tuvieron que usar cinta aislante o adhesiva (junto con mapas y grapas) para construir un improvisado "guardapolvos" para su Rover lunar.

Esta "pequeña chapuza" les permitió protegerse tanto a ellos como a sus instrumentos del polvo lunar y poder completar su misión. La narración del caso incluye las conversaciones de los dos astronautas, y puede descargarse en mp3.

Este incidente ya fue mencionado en una fotografía anterior en la página Astronomy Picture of the Day, y no es la única situación en la que los astronautas han tenido que recurrir a tan socorrida ayuda, como en 1970, cuando la tripulación del Apolo 13 salvó la vida tras construir un improvisado filtro de aire para su módulo lunar.

Una curiosidad más como las que se cuentan en Diez historias que quizá no conocías sobre la carrera espacial.

2 comentarios:

  1. Tengo una duda sobre la foto:
    Por qué no hay huella detrás o delante de la rueda, sobre la superficie lunar?
    La rueda está sucia, como si hubiesen estado circulando, pero el suelo no tiene ni una marca.
    Además siempre me pregunté: Si no hay gravedad, cómo consiguen que el vehículo se quede pegado al suelo??!

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  2. La Luna tiene muy poca gravedad, pero tanto como decir que no la tiene... Un saludo.

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